Hemos
recibido con suma sorpresa y preocupación la Declaración General
Política de la Segunda Reunión Mundial de la ICOR (Coordinación
Internacional de Organizaciones Revolucionarias), celebrada en
Alemania, la primera semana del mes de abril del año en curso.
El
principal motivo de honda preocupación política se refiere a las
resoluciones que “ocuparon
un lugar central en la discusión política”:
en primer lugar los movimientos por la libertad y la democracia en
todo el mundo y en segundo lugar la lucha contra “la
amenaza ecológica global”.
Estas
dos consignas que muy bien podrían tomar las reuniones de los
partidos de la derecha, de los social-demócratas e incluso de
extrema derecha, nos muestran que la ICOR “miró
a otro lado”,
frente a los acontecimientos de significación histórica que se
desarrollan entre las fuerzas revolucionarias de varias partes del
mundo en su lucha a muerte contra el imperialismo de la OTAN y el
nazi-fascismo resucitado.
1.
En primer
lugar se encuentra la heroica e histórica resistencia de los
comunistas de Ukrania, sobre todo del este y el sur contra el
nazi-fascismo que ha tomado el poder en Kiev y pretende incorporar a
todo el país en el cerco que la OTAN pretende completar con misiles
a unos cientos de kilómetros de Moscú, en franca provocación
contra Rusia. Es pues realmente sorprendente e insólito que en las
resoluciones de la Segunda Reunión Mundial de ICOR no se haga
mención del nombre de Ukrania y los combates heroicos que en
condiciones desfavorables muestran a nuestros camaradas enarbolando
las banderas rojas con la hoz y el martillo y las efigies de Lenin y
Stalin, mientras el nazismo otaniano arremete con armas pesadas,
aviación y blindados contra la población civil comunista del
Donbas, Lugansk, Odessa y Kharkov y se reemplace esos acontecimientos
con la mención de otros problemas de menor importancia. Mientras en
Alemania los verdaderos comunistas están preparando Brigadas
Internacionales con el nombre del héroe espartaquista Ernest
Thaelman para defender a los comunistas y estalinistas que resisten
la arremetida nazi y otaniana, la ICOR está mirando
“sospechosamente” a otro lado.
2.
En la resolución principal, de igual modo, se ignora, como si no
existieran luchas importantes de carácter internacional en América
Latina frente a las agresiones e injerencias abusivas del
imperialismo contra los países anti-imperialistas en este caso
principalmente en Venezuela, la que no es, otra vez, ni siquiera
mencionada en esas resoluciones. Lo mismo ocurre con las agresiones
sostenidas del imperio contra Bolivia, Nicaragua, Cuba o Ecuador. Es
realmente inexplicable el hecho de que las delegaciones de América
Latina presentes en la reunión no hubieran hecho mención a la
actual situación de lucha de clases aguda en la República
Bolivariana de Venezuela. Es una vergüenza que no hubieran hecho
mención a la poderosa ola de integración de la Patria Grande
anti-imperialista que se desarrolla en América Latina.
3.
No se menciona, una vez más y cada vez más sospechosamente, la
lucha revolucionaria marxista, leninista y maoísta del pueblo
multinacional de la India, donde su Partido de vanguardia el Partido
Comunista de la India (Maoísta), lleva adelante una guerra popular
prolongada que gana cada día más espacio político y geográfico en
el mayor continente de la tierra.
4.
Otro tanto, la ignorancia total de la lucha armada revolucionaria del
Nuevo Ejército Popular de la Filipinas, no obstante el mensaje
solidario del camarada José María Sisson, es una muestra más de la
ceguera total de una Conferencia Mundial que parecería que estaba
tratando los problemas de otro planeta.
5.
La Conferencia sostiene:
“Algunos participantes opinaron que la contradicción contenida en
la cuestión medioambiental, se ha convertido en una de las
contradicciones de primer orden en el mundo actual”.
La Conferencia ha convertido a ICOR en una organización “verde”
que trata un problema que es una consecuencia directa de la
dominación mundial del imperialismo como si se tratara de la
contradicción principal del mundo contemporáneo, de modo que la
contradicción entre el Imperialismo y los pueblos del mundo queda
relegada a un lugar completamente secundario. Sabemos que la cuestión
medio ambiental solamente se resolverá cuando triunfe en el mundo la
revolución proletaria. Sin quitarle ninguna importancia al problema
del medio ambiente y considerar positiva la búsqueda de su
conservación como positiva, de ningún modo puede ocupar la
totalidad de la atención de una Conferencia que se titula marxista y
leninista, por lo mismo socialista con rumbo al comunismo. Todos
estos conceptos y sus respectivas consignas revolucionarias han
quedado en el olvido no sabemos si consciente o inconscientemente.
6.
En consecuencia, encontrándonos en posiciones lamentablemente muy
alejadas y en algunos casos contradictorias respecto al documento
central de la Segunda Conferencia, Nuestro Partido (MLM), ha
considera necesario tomar distancia de tales resoluciones y llamar a
que se abra un espacio público de debate frente a los puntos de
divergencia que son muchos y de importancia principista.
7.
Con anterioridad ya hicimos muchas críticas a la política
internacional de ICOR, con respecto a la consideración de los
maestros del proletariado internacional, los camaradas inmortales
como Stalin y Mao, pero otra vez no podemos conciliar nuestras
posiciones con los argumentos de la democracia tradicional y de una
“libertad” difusa que puede servir para cualquier interés
político, que en este caso son esgrimidos como puntos principales de
la Conferencia internacional.
Con
saludos revolucionarios. c. Jorge.
Por
La Comisión Política dependiente del Comité Central
Del PARTIDO
COMUNISTA (MLM)-BOLIVIA.
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