odiodeclase
Donald Trump y John Kelly
El presidente electo Donald Trump nombró a otro ex general a un gabinete
que cada día se parece más a una junta de ex militares y financieros
multimillonarios aunque al mismo tiempo, tal vez para diversificar un
poco, también seleccionó a la ex jefa de la lucha libre profesional para
sumarse a su gobierno, mientras que continuaban los esfuerzos para
revertir la elección del hoy nombrado “Hombre del Año” (y demagogo) por
la revista Time.
Trump nombrará (aun no es oficial) a John Kelly, un general retirado de los Marines
quien ha enfatizado la necesidad de imponer mayor seguridad en la
frontera con México, como su secretario de Seguridad Interna. Su último
mando -su jubiló en enero- fue el Comando Sur encargado
de unos 32 países de América Latina incluyendo Guantánamo (excluyendo
México) donde sus principales misiones son programas de capacitación
militar y abordar las llamadas “amenazas transfronterizas" de la guerra
contra el narcotráfico y la migración. Anteriormente, su destacada
carrera incluyó participación en la guerra en Irak durante varios años
entre 2003 y 2008. Su hijo fue muerto en combate en Afganistán.
John Kelly fue responsable del Comando Sur de EEUU
Kelly ha vinculado la amenaza del terrorismo al control de inmigración,
alertando al Congreso el año pasado que “organizaciones terroristas”
podrían usar las mismas rutas y redes ilícitas de contrabando humano
para “mover operativos con intenciones de causar graves daños a nuestros
ciudadanos y hasta traer armas de destrucción masiva a Estados Unidos”.
Como parte de ello, resaltó la “vulnerabilidad” que presenta la
frontera con México.
El Departamento de Seguridad Interna que encabezará incluye la agencias
de protección fronteriza, aduanas y servicio de inmigración. A la vez,
algunos defensores de inmigrantes reaccionaron con alivio ya que otro
candidato al puesto, Kris Kobach, arquitecto de leyes y normas
antimigrantes estatales y locales, no fue puesto a cargo de las fuerzas
migratorias del país.
Kelly será el tercer general retirado en ser nombrado al gabinete de
Trump, junto con James Mattis como secretario de Defensa y Michael Flynn
como Asesor de Seguridad Nacional. Otros ex generales están en la lista
de espera.
Trump también ha seleccionado a uno de los principales enemigos del
movimiento ecológico y un aliado de la industria de hidrocarburos como
su próximo jefe de la Agencia de Protección Ambiental (EPA). Scott
Pruitt, actual procurador general de Oklahoma, ha demandado a la misma
agencia que encabezará en oposición a sus normas y una voz prominente
contra el consenso científico mundial sobre las causas del deterioro
ecológico del planeta.
Mientras tanto, Trump seleccionó al gobernador de Iowa Terry Branstad
como su embajador en China en una movida que provocó confusión, ya que
el nominado es percibido como “amigo de China” por su larga relación con
la cúpula política de ese país aunque la semana pasada el presidente
electo había provocado un desconcierto diplomático con Beijing al romper
con la tradición de más de cuatro décadas al comunicarse directamente
con la presidenta de Taiwán. El gobernador conoció al actual presidente
chino Xi Jinping hace 30 años cuando éste era un funcionario rural
estudiando prácticas agrícolas en Iowa durante el primer periodo de
Branstad como gobernador.
Al mismo tiempo, el presidente electo nombró a Linda McMahon,
cofundadora y ex ejecutiva en jefa de World Wrestling Entertainment -la
principal empresa de espectáculos de lucha libre profesional- como jefa
de la Administración de Pequeños Negocios (SBA). Ella y su marido
conocen a Trump desde hace décadas, armaron hasta una “batalla de los
multimillonarios”, y donaron 6 millones de dólares a su campaña
electoral.
Trump también hoy envío otros mensajes contradictorios sobre sus
posiciones políticas -como ha sido su práctica desde que fue electo-
incluyendo sobre el destino que le espera a unos 750 mil inmigrantes
indocumentados jóvenes por ahora protegidos temporalmente de la
deportación por orden ejecutiva a través del programa conocido como
DACA.
En una entrevista con la revista Time comentó que en torno al DACA,
“vamos a trabajar sobre algo que dejará a la gente contenta y
orgullosa”. Agregó que los jóvenes “fueron traídos aquí a una edad muy
joven, trabajaron aquí, fueron a la escuela aquí. Algunos fueron buenos
estudiantes, algunos tienen empleos maravillosos”, y que ahora están en
un tipo de limbo “porque no saben qué sucederá”. Pero no ofreció
mayores detalles, ni declaró si anulará su promesa de revertir el DACA.
A la vez, Trump fue declarado como “la persona del año” por la revista
Time, pero la explicación de la decisión no fue un elogio: “Por
recordarle a Estados Unidos que la demagogia se nutre de la
desesperación y que la verdad es sólo tan poderosa que la confianza en
quien la dice, por empoderar un electorado oculto al normalizar sus
furias y… trasmitir sus temores…., Donald Trump es la persona del año de
Time en 2016”. Trump solo dijo que “es un gran honor… especialmente
porque crecí leyendo la revista Time”
Mientras tanto, continúan esfuerzos para buscar la manera de evitar la
coronación de la persona del año. Por un lado se sigue promoviendo una
rebelión dentro del Colegio Electoral que emitirá el voto oficial el 19
de diciembre para intentar negarle a Trump los 270 votos electorales
necesarios. La posibilidad es muy remota, pero ayer el primer elector
republicano, Christopher Suprun de Texas, anunció que no emitiría su
voto por Trump e invitó a otros a obedecer sus consciencias y hacer lo
mismo. Siete del lado demócrata ya habían invitado a sus colegas a esta
rebelión.
A la vez, los esfuerzos para un recuento en tres estados claves
-Michigan, Wisconsin y Pennsylvania- proceden con algunos atorones
legales, y ayer un grupo de votantes en Florida presentó una demanda
legal solicitando un recuento del voto en ese estado. Mientras tanto, la
ventaja de Clinton sobre Trump en el voto popular alcanzó mas de 2.7
millones.
La Jornada.
La Jornada.
No comments:
Post a Comment