Sunday, March 8, 2015

8 de marzo - Venezuela

8 de Marzo: Salvo el poder, todo es ilusión



Comunicado de Red Roja ante del Día de la Mujer Trabajadora.

Un año más comprobamos cómo la crisis, los recortes, y las reformas estructurales impuestas por la Unión Europea y ejecutadas por los gobiernos de turno para mantener a flote a la banca y la patronal, condenan a las mujeres a sufrir cada vez más y cada vez mayores agresiones en todos los frentes. El mantenimiento de la tasa de ganancia necesario para el sustento del sistema capitalista se nutre de la explotación del pueblo trabajador, especialmente de las mujeres.
 
Todas las reformas y planes adoptados o puestos en marcha desde el advenimiento de la crisis –especialmente bajo la “obligación” del pago de la Deuda- han supuesto un ataque a toda la clase trabajadora que se ha cebado de forma brutal con migrantes y mujeres. Por un lado, cientos de miles de personas han sido excluidas del sistema por no poder pagar los servicios privatizados, y por otro, la dinámica social reaccionaria y machista se ceba sobre las mujeres a través de la imposición de modelos de familia tradicionales y heteropatriarcales. El cuerpo de las mujeres es un campo de batalla y lo hemos vuelto a comprobar con el intento de reforma de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo: ahora más que nunca tratan de mermar nuestra independencia negándonos el derecho a decidir, excluyéndonos de la protección social, dificultando nuestra entrada al mercado laboral (eliminación y reducción de leyes y prestaciones de dependencia, privatización de escuelas infantiles, etc) o llevándonos a situaciones sin salida como antaño (cierre de casa de acogida, restricción de ayudas por maltrato, etc.).
 
Somos conscientes de que la destrucción del patriarcado no puede darse sin la destrucción del capitalismo: nuestra opresión específica como mujeres no desaparecerá hasta que lo hagan las condiciones materiales de la doble explotación. Esto no quiere decir que el avance hacia el socialismo elimine automáticamente la opresión de género; las mujeres trabajadoras debemos asumir en primera persona la responsabilidad de nuestra liberación. Pero ni podemos ni debemos estar solas en esa lucha. En nuestras organizaciones y en nuestras vidas, los compañeros deben revisarse y reconocer que quebrantar la reproducción del patriarcado en cualquier espacio es también su responsabilidad. Sin el trabajo de reproducción -feminizado, no remunerado- no puede existir el trabajo productivo. Por eso, si la experiencia de clase no es la misma para los género, tampoco puede ser las mismas las condiciones de la liberación.
 
Obviando todas estas cuestiones, estaremos estancadas en el espacio que la sociedad capitalista y patriarcal nos reserva. Debemos luchar contra las barreras que dificultan cualquier alternativa de liberación de las mujeres y que limitan su participación plena en las luchas en todos los ámbitos, también en las organizaciones.
 
Por ello, en Red Roja sabemos que la única alternativa a la crisis es el socialismo. Las tibias alternativas que proponen reformas para volver al “estado del Bienestar”, además de irreales, son inaceptables ya que se nutren del saqueo de los llamados “países del tercer mundo”, y especialmente de la explotación de las mujeres trabajadoras. Además, la lucha revolucionaria debe ser necesariamente antipatriarcal. Es necesario aumentar la participación de las mujeres en todas las luchas revolucionarias, ya que es un requisito indispensable para impulsar una línea feminista realmente transversal. El reconocimiento de las mujeres como sujetos independientes y activos en cualquier espacio de lucha es una exigencia inmediata.
 
En ese sentido las mujeres de Kobane o las de los destacamentos guerrilleros de la India han vapuleado miles de estereotipos patriarcales. La primera línea de las luchas en la calle debe traducirse en la participación a todos los niveles en las organizaciones y en los procesos de toma de decisión.
 
SIN NOSOTRAS NO HABRÁ REVOLUCIÓN

No comments:

Post a Comment