Saludo a las masas y a los mártires de Brasil
Como MFPR es con grande jubilo y emoción que hoy en esta celebración llevamos el fuerte saludo de las compañeras, de las trabajadoras, proletarias en lucha en nuestro pais, a las masas populares que están rebelandose y luchan en Brasil para avanzar en el camino para el nuevo poder.
Rendimos homenaje a todos y todas las mártires que son caidos luchando y combatiendo y han enarbolado alto la bandera roja de la lucha revolucionaria.
Con motivo del 50 aniversario de la Gran Revolución Cultural Proletaria en China, queremos honrar primero la companera Chiang Ching, militante y dirigente del Partido Comunista de China, cuya vida fue siempre al servicio de la lucha revolucionaria de las masas para la construcción de una sociedad libre de la explotación y la opresión del sistema dominante, para avanzar en el camino hacia el comunismo.
Grande fue el compromiso de Chiang Ching en el tema de las mujeres con el fin de desarrollar la lucha por una verdadera liberación de la opresión social y de la familia.
Las clases dominantes han distorsionado deliberadamente el sentido de la vida y la muerte de Chiang Ching y, en general, sobre su vida se conocen las mentiras y calumnias reportadas por la prensa burguesa. Es obvio que los opresores la han odiado, porque hoy, como entonces, Chiang Ching es un faro vivo y brillante para todos, una compañera y dirigente comunista que encarna plenamente el significado "Es justo rebelarse" y que, como mujer también puso concretamente en la práctica el lema "desatar la furia de la mujer como una fuerza poderosa para la revolución" ... demuestrando que esto es posible!
Chiang Ching tuvo que luchar no sólo contra el oscurantismo y el patriarcado en la sociedad china, sino también contra la interna al mismo PCCh, que por mucho tiempo, hasta los años 60, le impidió tener una función política pública.
Siempre al lado de Mao, luchó con fuerza contra todo lo que quería obstaculizar e impedir el desarrollo revolucionario de las masas en China, la construcción del socialismo; y fue principalmente en la Gran Revolución Cultural Proletaria lanzada por Mao en mayo de 1966, lo que puso en luz su gran firmeza y militancia ideológica, siempre defendiendola enérgicamente y hasta su muerte, contra los revisionistas, incluso dentro del Partido, que tenían como objetivo en realidad la restauración capitalista en china.
En la GRCP, Chiang Ching estaba a la vanguardia como una companera dirigente en varios frentes. Animò y dirigiò a muchos jóvenes rebeldes, la Guardia Roja, en dura lucha contra los seguidores del camino capitalista; ella defendiò hasta lo más profundo el derecho de las masas a asaltar los cielos, a desafiar la tradición y barrer con la vieja reacción en todos los secotres; luchò con gran entusiasmo contra el revisionismo, interviniendo de manera decisiva en el campo superestructural de la cultura y la educación, dando una gran contribución también a la revolución en las artes, en particular, en el contexto del teatro, de acuerdo con la línea revolucionaria proletaria que tenía como centro el acción de las masas contra la línea revisionista que detrás de un aparente nuevo siguió defendiendo los privilegios de clase.
Después de la muerte de Mao durante 15 largos años fue encarcelada por los revisionistas que, con un golpe de estado, tomaron el poder. Pero incluso en la cárcel Chiang Ching con gran fuerza y orgullo, continuó a rebelarse y reclamar la justeza de la GRCP, teniendo en alto la bandera roja del mlm, del comunismo, hasta que sus carceleros, incapaz de doblar su voluntad, la dejaron morir.
Pero su muerte no ha cierto eliminado su incalculable valor y ejemplo para las mujeres y toda la humanidad, no ha eliminado el hecho de ser una de las más grandes líderes revolucionarias comunistas de nuestro tiempo, a la que las mujeres, y especialmente las compañeras, las revolucionarias, las comunistas tienen que mirar, si realmente quieren asaltar los cielos.
Hoy en China, la izquierda maoísta que trabaja para retomar el camino trazado por Mao, mira y se refiere a Chiang Ching, y miles son los testimonios de amor revolucionario que incluso con mucha dificultad salen a la luz.
Quien no valora el papel de Chiang Ching en la GRCP, no reconoce en realidad el papel del movimiento de las mujeres revolucionarias en la RCP, y levanta la bandera de la GPCR para sabotear la GRCP.
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La Gran Revolución Cultural Proletaria fue la experiencia más moderna del proletariado, que ha mostrado cómo llevar la lucha revolucionaria en todos los ámbitos, no sólo en la estructura, sino también en la superestructura. Las mujeres durante los años anteriores a la RCP, con la revolución democrática y socialista y la República Popular ya habían adquirido grandes cambios sociales: la entrada masiva en el mundo laboral, en las fábricas, la reforma de la ley de matrimonio, la reforma del sistema de educación, se vean los cursos de educación gratuita para las campesinas, la reforma agraria, etc. que habían llevado a las mujeres de una negra opresión estatal a "liberar a sus pies, sus cuerpos, sus espíritus"; pero es con la GRCP que las mujeres están llamadas a ser ellas mismas las protagonistas del asalto al cielo, para llevar a cabo directamente la "revolución dentro de la revolución".
Durante el viento de la GRCP las mujeres han tenido que luchar en todos los ámbitos, para ganar la mitad del cielo: Desde las casas, y fuera de las casas, a los barrios, a las fábricas, a una nueva educación de los niños; Contra la violencia sexual organizaron comités de vecinos que hacian procesos populares contra los maridos, los padres violadores; Se distribuyeron las píldoras anticonceptivas para las mujeres que pudieran comenzar a decidir de su propia vida y maternidad ...
Pero para hacer esto tuvieron que luchar contra las concepciones y los obstáculos, incluso entre los cuadros del partido, pero sobre todo siempre tuvieron que luchar valientemente contra los tentativos revisionistas de Liu Shao-chi que queria excluirlas del trabajo y relegarlas de nuevo en el trabajo doméstico.
"Liu Shao-chi era hostil a una opción que pondría a las mujeres a la vanguardia de la producción, fuera del hogar doméstico, de acuerdo con la elección de un modo de acumulación capitalista, tal que se desarrollò tradicionalmente en el mundo, relegando a la mujer en precisas imágenes como amas de casa.
Liu Shao-chi favorecía una política de incentivos y salarios más altos que permitirían al hombre el mantenimiento económico de la mujer restauradas a su papel tradicional de ama de casa. (De la revista Bandera Roja).
En la revista del partido, "Bandera Roja" de 1971 se dice: un problema abierto en China es "valorizar el papel revolucionario de la mujer". Y se realiza una evaluación de la lucha entre las dos líneas y las dos clases durante la revolución cultural y cómo la línea contrarrevolucionaria de Liu Shao-chi en el movimiento de mujeres se ha roto. "Sin embargo - escribió Bandera Roja - la lucha de clases no ha terminado. Durante la revolución y la construcción socialista, todavía hay una lucha de clases seria sobre el tema de las mujeres ".
El Presidente Mao dijo: "Tenemos que luchar más contra las concepciones que desprecian el movimiento de las mujeres". Por esto, el Comité del Partido y los dirigentes incitaron a los compañeros para evaluar la importancia del trabajo de las mujeres a partir de tres aspectos:
1) iniciar desde la concepción de la lucha de clases para hacer frente con el trabajo de las mujeres: si el proletariado no hace uso del pensamiento de Mao Tse-tung para educar a las mujeres, la burguesia va a utilizar el pensamiento distorsionado de las clases explotadoras para hacer daño a las mujeres;
2) Las mujeres son más de la mitad de la población, y sin su plena movilización no puede existir un verdadero movimiento de masas;
3) las mujeres representan un gran potencial humano.
A través de esos “tres aspectos” todos han comprendido mejor que para hacer una revolución es esencial movilizar a las mujeres".
"Es necesario movilizar a las mujeres, ya que rompan las cadenas espirituales y desplegan un espíritu revolucionario. A través de la influencia de la milenaria ideología feudal, entre las mujeres, afectadas por el veneno de la línea revisionista contrarrevolucionaria de Liu Shao-chi, todavía había una minoría encadenada a las viejas concepciones tradicionales".
"Las mujeres sostienen la mitad del cielo", dijo Mao. “Pero las mujeres tienen que conquistar la mitad del cielo", agregó. La revolución cultural proletaria en este campo también ha tenido uno de sus frentes político e ideológico, porque las mujeres aún no habían llegado a la mitad del cielo".
En "Bandera Roja", se leía que durante la gran revolución cultural la mentalidad de la mujer "ha experimentado grandes cambios y muchos más serán las mujeres que realizan su función en la construcción del poder."
Las trabajadoras en la RCP indicaron que su compromiso, no sólo tenia que ser productivo, y también se utilizaba una mano de obra que en otras empresas permanecerían en paro; este compromiso tenía la intención de transformar el entorno social en el que operaban. Y en el centro de esta transformación no sólo existía la concepción cambiante de su condición de mujeres, pero la transformación revolucionaria en el barrio y en la familia, del papel de la mujer.
"Incluso dentro de las familias hay una transformación revolucionaria que hacer", dijo una joven camarada "hay que hacer penetrar la crítica revolucionaria, basada en la destrucción de las cinco ideas viejas, y introducir los cinco nuevos conceptos: destruir la tesis de la inutilidad de las mujeres, establecer la tesis de que las mujeres tienen que conquistar con valor la mitad del cielo, destruir la moral feudal de la esposa sumisa y buena madre para establecer en su lugar el ideal de los revolucionarios proletarios; destruir la mentalidad de dependencia y subordinación al hombre, y establecer una firme voluntad de liberarse; destruir las concepciones de la burguesía y el establecimiento de las concepciones proletarias; destruir la concepción del interés familiar para establecer la concepción proletaria de la familia".
"El proletariado, con la revolución cultural, hizo su incursión en la ideología, incluso revolucionarizando el aparato ideológico de la familia, superando siempre la condición que hizo exclamar a Engels de que la mujer es proletaria dos veces, una vez de la sociedad y otra vez del hombre".
"Cuando se movilizan las mujeres, se pueden hacer grandes cosas." Dijo una de las organizadoras de un barrio en China.
Para Mao el tema de las mujeres se ponía siempre más en el orden del día en sus reflexiones.
Incluso afuera de China, estudiaba las fuerzas de los movimientos de emancipación de las mujeres en los Estados Unidos y otras sociedades occidentales. Él apoyó las revueltas de las mujeres que serpenteaban en todo el mundo.
En el camino no fácil pero emocionante de la lucha revolucionaria, por lo que la mayoría de las mujeres están libres dela doble opresión producida por este sistema capitalista que no puede ser reformado, pero sólo derrocado, la GRCP nos enseña que la revolución es incompleta si no se desarrolla una "revolución en la revolución” necesaria para romper todas las cadenas económicas e ideológicas del sistema burgués que usa la opresión de la mujer como base para su existencia.
Serán necesarios más RCP, porque las ideas, los hábitos, las concepciónes, la cultura burguesa, las viejas relaciones, que son para las mujeres una fuente infinita de opresión, no cambian de un día para otro. Es necesario continuar la revolución para derrocar a la tierra sino también el cielo, hasta a la relación entre el hombre y la mujer, que son aún más duros de matar, aún más difícil de ser derrocadas.
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Estas enseñanzas tienen que se agarradas hoy y en cada etapa:
En la batalla que mira a la conquista de las mujeres, de las proletarias a la lucha revolucionaria, el maoísmo y la GRCP son un desafío contra el revisionismo, el feminismo burgués, porque muestran el camino para que todas las instancias de rebelión contra el capitalismo, la ideologia patriarcal y la ideología moderno-fascista puedan y deben encontrar sus formas organizadas de combates en la lucha por la revolución.
En Italia, inspiradas por la batalla de Chiang Ching, hemos levantado la bandera de la "revolución dentro de la revolución".
El primer núcleo del MFPR, organismo generado del Partido Comunista Maoísta de Italia, fue fundado en 1995 como "colectivo Chiang Ching". La referencia a Chiang Ching, a la GRCP significó agarrar el lema: "Es justo rebelarse", significó luchar contra los neorevisionistas, los economicistas, los oportunistas, las feministas burgueses y pequeñoburgueses; sino también contra el machismo/patriarcalismo presente dentro de las organizaciones y partidos comunistas, y el mecanicismo m-l que niega la necesidad de una revolución en la revolución de las mujeres para mover cielo y la tierra, y romper las dobles cadenas de lo universo femenino!
Pero incluso ahora, sin una lucha/ruptura contra las muchas opresiones/cadenas de las mujeres, sobre todo aquellos de la familia, sino también de la opresión, los hábitos burgueses ideológicas, las mujeres proletarias a menudo, incluso en los países imperialistas como el nuestro, ni siquiera podrian participar en un evento, tal huelga.
La lucha de las mujeres debe llevar a la clase a manejar con el hecho de que si quiere dirigir todo, y la clase obrera tiene que dirigir todo, debe dirigir un movimiento que también involucra a todas las condiciones de las mujeres.
Pero sobre todo en la lucha por la construcción del Partido Comunista de nuevo tipo las compañeras deberían agarrar la concepción de la "revolución dentro de la revolución" para luchar en todos los ámbitos, incluso en el partido, la persistencia de las ideas burguesas, y tomar el partido en sus manos.
¡Viva el 50 aniversario de la GRCP!
¡Viva la camarada Chiang Ching!
¡Viva la revolución en la revolución!
¡Desencadenar la furia de la mujer como una fuerza poderosa de la revolución!
En conclusión, las compañeras del Movimiento feminista proletario revolucionario también quieren expresar aquí, con dolor y amor revolucionario, un fuerte saludo a la camarada Sandra Lima, fundadora y dirigente del Movimiento Femenino Popular Brasil y militante revolucionaria marxista-leninista-maoísta.
Algunas de nosotras hemos tenido la alegría y el honor de conocer a la camarada Sandra, su fuerza, su indomable espíritu revolucionario.
Que siempre estará con nosotros su memoria, vamos a esparcir sus palabras, y será para nosotros una referencia en la difícil pero apasionante lucha revolucionaria de las mujeres, donde una vez más las compañeras como Sandra dan un ejemplo de una determinación de combate, el valor hasta el último momento de sus vidas.
Nos unimos al grito de las companeras y los compañeros de Brasil:
"Companheira Sandra: Presente na luta!"
Movimiento Feminista Proletario Revolucionario Italia
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